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Papalometl (Agave potatorum) es el agave que Amando elige trabajar como una forma de preservar la tradición de su aislado pueblo: Santa María Ixcatlán, Oaxaca. Tras haber pasado gran parte de su infancia en el palenque de su padre, Amando destiló su primer lote a los 15 años. Bajo la guía de su padre —también llamado Amando— aprendió a cosechar agave silvestre y cultivarlo en su punto óptimo de madurez con machete, cocerlo en un horno de tierra, machacarlo a mano con mazo de madera, fermentar en cueros y destilar dos veces en pequeñas ollas de barro.

A pesar de su juventud, Amando es uno de apenas una docena de productores que aún conservan la práctica centenaria de fermentar en cuero crudo y destilar en barro, una tradición profundamente arraigada en Ixcatlán.

Recientemente, Amando lanzó su propia marca: Ixcateco. Aunque todavía se puede encontrar este Papalometl embotellado por Cinco Sentidos, los futuros lotes serán lanzados bajo esta nueva etiqueta, orgullosamente producida por las manos que la poseen.

Además, Amando colabora con La Fundación para la Reserva de la Biósfera Cuicatlán, a la cual proporciona parte de sus destilados. Esta alianza busca proteger la biodiversidad de la región, reforestar especies endémicas de agave y avanzar hacia un modelo de producción verdaderamente sostenible.